QUIROMASAJE VALLADOLID
EL QUIROMASAJE
El quiromasaje es una técnica de masaje manual que se basa en la aplicación de presión, fricción, percusión o vibración sobre los tejidos blandos del cuerpo, con fines terapéuticos o relajantes. El término quiromasaje proviene de la unión de las palabras griegas “quiros” (mano) y “massein” (amasar), y fue acuñado por el doctor Vicente Lino Ferrándiz García en España en el año 19301.
El quiromasaje tiene como objetivo principal mejorar la salud y el bienestar de las personas, actuando sobre el sistema muscular, circulatorio, nervioso, linfático y emocional. El quiromasaje puede tener diferentes finalidades, según el tipo de maniobra, la intensidad, la velocidad, la duración y la frecuencia del masaje. Algunas de estas finalidades son:
– Relajar los músculos tensos o contracturados, aliviando el dolor y la rigidez.
– Estimular la circulación sanguínea y linfática, favoreciendo el aporte de nutrientes y oxígeno a los tejidos y la eliminación de toxinas y desechos.
– Equilibrar el sistema nervioso, reduciendo el estrés, la ansiedad y el insomnio, y aumentando la sensación de bienestar y placer.
– Prevenir o tratar lesiones deportivas, mejorando la elasticidad, la movilidad y el rendimiento muscular.
– Mejorar el aspecto de la piel, hidratándola, tonificándola y previniendo o atenuando las arrugas y la celulitis.
– Favorecer el equilibrio emocional, liberando las emociones reprimidas o negativas y potenciando las positivas.
Para realizar un quiromasaje se utilizan únicamente las manos del terapeuta, que pueden aplicar diferentes técnicas o maniobras según el efecto deseado. Algunas de estas técnicas son:
– Pases magnéticos o sedantes: consisten en deslizar suavemente las manos sobre la superficie de la piel, siguiendo el sentido de la circulación venosa o linfática. Se utilizan para relajar, calmar o preparar la zona a tratar.
– Vaciado venoso: consiste en presionar ligeramente con los dedos o las palmas de las manos sobre las venas superficiales, siguiendo el sentido del retorno venoso. Se utiliza para mejorar la circulación sanguínea y prevenir o tratar problemas como las varices o los edemas.
– Amasamientos: consisten en coger, levantar, apretar y soltar los tejidos blandos con los dedos, las manos o los puños. Se utilizan para estimular, tonificar o relajar los músculos, según la intensidad y la velocidad del amasamiento.
– Percusiones: consisten en golpear rítmicamente los tejidos blandos con las manos abiertas, cerradas o en forma de cuchara. Se utilizan para activar, estimular o descontracturar los músculos, según la fuerza y la frecuencia de la percusión.
– Vibraciones: consisten en aplicar movimientos rápidos y continuos con las manos sobre los tejidos blandos. Se utilizan para relajar, sedar o estimular los nervios periféricos.
El quiromasaje es una técnica muy beneficiosa para la salud física y mental de las personas, siempre que se realice por un profesional cualificado que sepa adaptar el masaje a las necesidades y características de cada persona. Sin embargo, el quiromasaje también tiene algunas contraindicaciones o precauciones que hay que tener en cuenta antes de recibirlo. Algunas de estas contraindicaciones son:
– Fiebre, infección o inflamación aguda: el masaje puede empeorar el proceso infeccioso o inflamatorio al aumentar la circulación sanguínea y linfática.
– Heridas abiertas, quemaduras o hematomas: el masaje puede dañar aún más los tejidos lesionados o provocar sangrados o infecciones.
– Fracturas óseas o luxaciones articulares: el masaje puede interferir con el proceso de consolidación ósea o desplazar los huesos fuera de su posición normal.
– Trombosis venosa profunda: el masaje puede desprender un coágulo sanguíneo que obstruya una arteria y provoque una embolia pulmonar o cerebral.
– Embarazo: el masaje puede provocar contracciones uterinas o alterar el flujo sanguíneo al feto, especialmente en el primer y último trimestre de gestación.
Además de los beneficios emocionales, el quiromasaje también es beneficioso para problemas musculares y articulares. Mediante la manipulación de los tejidos blandos, se alivian contracturas y tensiones musculares, mejora la flexibilidad y aumenta el rango de movimiento de las articulaciones. Esto es especialmente beneficioso para personas que sufren de lesiones deportivas o problemas crónicos como la artritis.
El quiromasaje también puede contribuir a la mejora de la circulación sanguínea y linfática. Mediante la aplicación de presión y movimientos específicos, se estimula el flujo de sangre y linfa, lo que ayuda a eliminar toxinas acumuladas en el cuerpo y a mejorar la oxigenación de los tejidos. Esto puede tener un impacto positivo en la piel y otros órganos internos.
En general, el quiromasaje es una terapia no invasiva y segura, pero es esencial hablar con el masajista sobre cualquier condición médica o lesión existente para asegurarse de que la técnica se adapte a las necesidades individuales de cada persona. Con la atención adecuada, el quiromasaje es una herramienta valiosa para mejorar la salud y el bienestar en general.
El quiromasaje es una técnica de masaje manual que tiene múltiples beneficios para la salud y el bienestar de las personas, siempre que se realice con criterio profesional y respetando las indicaciones y contraindicaciones del mismo. El quiromasaje es una forma natural y sencilla de cuidar de nuestro cuerpo y de nuestra mente, proporcionándonos un estado de relajación, equilibrio y armonía. ¿A qué esperas para probarlo?